Por: Angélica Gutiérrez
Durante la visita de las Caravanas Móviles de Salud en el Centro de Readaptación Social (Cereso) se atendieron 991 reos, de los que el 15 por ciento recibió orientación psicológica siendo la de mayor demanda, seguido con las consultas médicas que representa el 13 por ciento, además de que al 13 por ciento se le entregaron medicamentos y 11 por ciento se realizaron estudios de laboratorio. Flavio Rosado dijo que esto es para garantizar la salud de todos muy independiente de sus procesos legales.
Entre otros servicios que ofrecieron durante su visita del 28 al 30 de mayo, atenciones de salud dental, por optometría, radiografías, electrocardiogramas, orientación nutricional, densitometrías, audiometría, ultrasonidos y mastografías. El objetivo de estas caravanas llevar atención a lugares donde no se tiene acceso tan fácil a una consulta médica.
Por su parte Eloy Rojas psicólogo aseguró que la atención a la salud mental y emocional de los reclusos es muy importante para su rehabilitación, además de mejorar la calidad de vida en un ambiente totalmente desconocido, ya que pueden experimentar estrés extremo o depresión por la situación que están viviendo.
También explicó que esto también va de la mano con la salud física es por ello que se recomienda en los centros penitenciarios una atención integral, que vaya de la amano con la parte psicológica y trabajar en eso, en caso de que el recluso tenga la oportunidad de obtener su libertad, su adaptación al mundo real sea más fácil y para los que cumplen condenas muy largas puedan sobre llevar el proceso de una manera más positiva.
Desde julio del 2024 se integró la visita de las Caravanas de Salud Móviles en CERESO de Cancún, para dar respuesta a la demanda de organizaciones de derechos humanos y civiles, que han señalado el reto de brindar más y mejores servicios de salud en los centros de reclusión, además de buscar una mejora en la calidad de vida y el bienestar general, que es crucial para los procesos de reintegración social.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Derechos Humanos El Estado tiene la obligación de garantizar este derecho, incluso para las personas privadas de libertad. Esto implica que los reclusos deben tener acceso a servicios de salud que sean de calidad y que se adapten a sus necesidades individuales.
