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Orgullo y Justicia: Legislando para Todas las Personas

Por: Jorge Sanén

Junio es un mes que llena de color las calles y nos recuerda que la lucha por la igualdad sigue vigente. Es el mes del orgullo LGBTQ+, pero también es el mes de la dignidad, del respeto, de la libertad. En el Congreso del Estado de Quintana Roo no solo lo conmemoramos: lo legislamos.

La justicia social no puede ser selectiva. O es para todas las personas, o no es justicia. En esta XVIII Legislatura hemos asumido con responsabilidad nuestro papel para construir un estado más incluyente. Hemos impulsado reformas que reconocen identidades, garantizan derechos y protegen a quienes históricamente han sido marginados por su orientación sexual o identidad de género.

Pero esta causa no se trata solo de leyes, sino de voluntad política y de sensibilidad humana. La discriminación todavía vive en muchos rincones de nuestra sociedad: en el trabajo, en las escuelas, en las instituciones. Y el reto de erradicarla empieza por el reconocimiento pleno de todas las formas de ser y amar.

Desde el Congreso, defendemos una visión en la que el amor no se esconde, se celebra. En la que la diversidad no se tolera, se respeta. Y en la que el Estado no señala diferencias, sino que construye puentes. Por eso, hemos sido aliados activos de colectivos, organizaciones civiles y defensoras de derechos humanos que han impulsado cambios históricos en nuestro estado.

No podemos hablar de transformación sin hablar de inclusión. No hay justicia si hay ciudadanos de segunda. La Cuarta Transformación, que encabeza nuestra presidenta Claudia Sheinbaum, ha dejado claro que gobernar con el pueblo también es gobernar para quienes han sido invisibilizados durante décadas.

En este mes del orgullo, más allá de las banderas y los eventos, reafirmamos nuestro compromiso con una política que abrace la diversidad y promueva la paz social. Porque una sociedad que excluye, se fractura. Pero una sociedad que reconoce, avanza.

Como diputado local, como ser humano, y como aliado, lo digo con convicción: en Quintana Roo, el orgullo también se escribe con leyes.

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