La flor de cempaxúchitl llega a Chetumal para las celebraciones del día de muertos

La tradicional flor de cempaxúchitl, símbolo del Día de Muertos en México, ya ha comenzado a llegar a la capital del estado, procedente del centro del país, para su comercialización en viveros, mercados y florerías locales. Con su característico color anaranjado y su aroma inconfundible, esta flor representa un elemento esencial en los altares y ofrendas que las familias chetumaleñas preparan para honrar a sus difuntos.

De acuerdo con comerciantes locales, el precio de la flor varía según el punto de venta y la cantidad de flores que contenga cada maceta. En viveros, los precios oscilan entre 80 y 150 pesos, dependiendo del tamaño y la densidad del follaje. Sin embargo, en las florerías de la ciudad, el costo puede superar los 150 pesos, debido a los gastos adicionales de transporte, exhibición y mantenimiento.

Juan Álvarez, comerciante dedicado a la venta de flores desde hace varios años, comentó que esperan un repunte en las ventas conforme se acerque la fecha del Día de Muertos, el 1 y 2 de noviembre. “La gente acostumbra comprar la flor los últimos días de octubre, cuando ya están montando sus altares. Por ahora hay poca demanda, pero esperamos que en la próxima semana aumente considerablemente”, explicó.

Álvarez detalló que, además del cempaxúchitl, otras flores tradicionales como las margaritas y los crisantemos también comienzan a tener presencia en los puntos de venta. Estas especies, utilizadas comúnmente para adornar ofrendas y panteones, tienen precios que rondan los 150 pesos, aunque podrían variar conforme se acerque la temporada alta. “Todo depende de la demanda. Si llegan más pedidos o si el transporte desde el centro del país se complica, los precios pueden subir”, señaló el comerciante.

Hasta el momento, solo unos pocos establecimientos en Chetumal han comenzado a ofrecer la flor de cempaxúchitl, principalmente en viveros ubicados en la periferia y en algunos puntos del mercado central. Los comerciantes explican que la distribución aún es limitada, pues el traslado de las plantas requiere condiciones especiales para mantenerlas frescas y en buen estado, ya que las altas temperaturas de la región pueden afectar su durabilidad.

La flor de cempaxúchitl, también conocida como “flor de los muertos”, tiene una profunda carga simbólica en la cultura mexicana. Su color naranja intenso se asocia con el sol y la luz que guía a las almas de los difuntos hacia el mundo de los vivos durante las celebraciones del Día de Muertos. Por ello, cada año su llegada a los mercados marca el inicio de una de las tradiciones más arraigadas del país.

Los productores y vendedores esperan que este año las ventas sean favorables, especialmente después de temporadas en las que la inflación y el costo del transporte encarecieron los insumos. Asimismo, confían en que el turismo y la reactivación económica contribuyan a mantener la demanda. “El cempaxúchitl es una flor que no puede faltar. Aunque haya crisis, la gente siempre busca tener aunque sea una maceta para su altar”, comentó Álvarez.

Mientras tanto, los consumidores comienzan a recorrer los viveros y florerías en busca de las mejores opciones, comparando precios y calidad. En los próximos días se espera una mayor afluencia de compradores, conforme Chetumal se prepara para rendir homenaje a sus fieles difuntos, entre aromas, colores y tradiciones que mantienen viva una de las celebraciones más representativas de México.