Parque Kabah impulsa el turismo de avifauna y refuerza su valor ecológico en Cancún
El turismo de avifauna continúa posicionándose como una de las nuevas tendencias sostenibles en el Caribe Mexicano, atrayendo cada vez a más visitantes nacionales e internacionales interesados en el contacto directo con la naturaleza y la observación responsable de especies.
En Cancún, el Parque Kabah se ha convertido en un punto de encuentro para quienes buscan experiencias ecológicas auténticas, promoviendo actividades gratuitas de observación de aves, conocidas popularmente como pajareadas, que buscan fomentar la educación ambiental y el respeto por los ecosistemas locales.
De acuerdo con Pablo Rubio Taboada, titular de Áreas Naturales Protegidas del municipio, estas actividades se realizan con el propósito de fortalecer la conciencia ambiental y ofrecer una alternativa turística distinta a la tradicional.
Señaló que el objetivo es organizar al menos una pajareada al mes, pues la dinámica ha generado gran interés entre los habitantes de Cancún y visitantes que encuentran en este espacio una oportunidad para reconectarse con la biodiversidad.
Señaló que algunas de las aves que se han encontrado son: la Chara Yucateca, Carpintero Cheje, Cardenal Rojo, Loro Yucateco, Luis Bienteveo, Maullador Negro, Colibrí Canelo, por mencionar algunos.
El funcionario explicó que recientemente concluyó el inventario forestal del Parque Kabah, cuyos resultados arrojaron la existencia de 99 especies de flora documentadas oficialmente dentro del área natural.
Este registro constituye un avance significativo, ya que permite conocer con mayor precisión los recursos biológicos que habitan en este sitio, considerado uno de los pulmones verdes más importantes en el centro urbano de Cancún.
Rubio Taboada destacó que la formalización de este inventario refuerza la necesidad de preservar y proteger el entorno natural, ya que el parque no solo alberga una rica variedad vegetal, sino también fauna endémica que depende de este hábitat para su supervivencia.
Subrayó que contar con datos actualizados es fundamental para diseñar estrategias de conservación, así como para promover entre la población el valor ecológico de estos espacios.
Entre las especies vegetales más representativas del parque se encuentran el chechén, el chacá, el jabín y el guaiacum sanctum, esta última una planta protegida de crecimiento extremadamente lento, que puede tardar hasta 15 años en florecer por primera vez.
Las 42 hectáreas que conforman el Parque Kabah continúan siendo objeto de estudio por parte de especialistas y autoridades ambientales, quienes buscan generar mayor conocimiento sobre la diversidad biológica que resguarda este pulmón natural.
El titular de Áreas Naturales Protegidas municipal subrayó que el Parque Kabah representa un espacio esencial para la convivencia entre la comunidad y la vida silvestre el cual fomenta una cultura ambiental orientada a la sostenibilidad.
