Comercios en Chetumal con más de 80 años de historia
“Soy llamada ‘Casa López’ y durante mucho tiempo estuve funcionando como un comercio de diferentes giros, cuento con más de 80 años de historia. Nací en la ciudad capital de Quintana Roo para vender una gran variedad de juguetes e instrumentos musicales, de prestigiosas marcas, porque aquí llegaba de todo y de muy buena calidad”.
Mi creador fue Don Ángel López Ituarte, quien en 1936 llegó a Payo Obispo procedente de su natal Ciudad de Mérida, Yucatán, para probar suerte, ya que, durante el gobierno del general Rafael E. Melgar, no solamente se hicieron grandes obras materiales, sino también, nos dio prosperidad y su fama trascendió más allá de las fronteras, a través de las cooperativas y varias acciones y obras de diversa índole.
“En esta casa, mis dueños vendían de todo con tal de pagar la comida y la renta de una pequeña casita de madera. Recuerdo que en 1940 decidieron adquirir un carrito de madera, para exhibir la mercancía, cerca de la legendaria “Casa Aguilar” en el camellón de lo que hoy es la avenida Héroes. Me llamaron “Kiosco López” y en pocos años el negocio familiar de padre e hijo prosperó por lo que se inició la construcción de una tienda de madera a cargo de mi creador, el carpintero Prisciliano Puerto, al principio medí tan solo cinco por seis metros y estuve rotulada con el mismo nombre”.
“Me salvé de un incendio que se registró en el mes de agosto de 1943 que inició en el Hotel México, que alcanzó casas y comercios, como lo fueron: “Casa Erales”, la “Casa Namur” y un restaurante de Don Manuel Ríos Uribe, entre otros más, y de milagro me salvé, esta catástrofe fue el motivo para que me empezaran a construir de material de concreto”.
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“De todo el terreno del que yo dispuse en algún momento, mis dueños solo se quedaron con este espacio que pueden ver actualmente, pues la esposa de mi propietario enfermó y vendieron gran parte de la propiedad. Con mucho esfuerzo me fueron construyendo con mampostería y ampliaron el mostrador comercial”.
Según el cronista fue en los años sesenta que los propietarios la convierten en la famosa “Casa López” y la música que tanto apasionaba a Don Ángel, se podía escuchar cada tarde al vender instrumentos musicales como la guitarra “Campechana” y los de la prestigiosa marca “Yamaha”.
Prueba de esta vida de más de 80 años es una fotografía de hace 48 años, en la que podemos apreciar varios negocios ubicados al noreste como “Casa Mólgora, “El Samurai” seguido de la “Casa López” ya un nivel más construido y su balcón que ya no existe ante el deterioro causado por falta de mantenimiento.
El pasado 14 de marzo, esta emblemática casa sufrió una consecuencia del paso del tiempo, pues el barandal principal se vino abajo. La casa se encontraba abandonada desde hace varios años, al igual que otras que ya no funcionan debido a su deterioro, pero se han convertido en testigos de la ciudad Chetumal, de acuerdo con el cronista de la ciudad, Fabian Herrera Manzanilla.
