Peregrinaciones se topan con obras del Tren Maya
Con la llegada de la temporada de peregrinaciones anuales, miles de devotos inician sus recorridos para cumplir mandas a la Virgen de Guadalupe. Sin embargo, este año, aquellos que transitan a pie o en bicicletas por las carreteras de la península de Yucatán para llegar al Santuario Mariano Guadalupano de Chetumal enfrentan desafíos debido a la saturación de camiones pesados derivada de las obras del Tren Maya.
El Santuario Mariano Guadalupano emitió un llamado a los peregrinos, instándoles a evitar las rutas tradicionales debido a los trabajos en curso por el Tren Maya. El Párroco, David Martín Leal, solicitó la comprensión a los fieles católicos, señalando los riesgos asociados con la presencia de maquinaria pesada y el aumento de accidentes en las carreteras.
A pesar de asegurar que los peregrinos serán bien recibidos en el Santuario, el Párroco recomendó medidas restrictivas, aconsejando a los devotos llegar hasta la ciudad de Chetumal a bordo de autobuses y camionetas seguras. Propuso descender en la zona urbana, posterior a la plaza comercial en la avenida Insurgentes, y peregrinar con precaución dentro de la ciudad.
Martín Leal destacó la importancia de evitar riesgos en las carreteras debido a la presencia de vehículos pesados relacionados con las obras del Tren Maya. Además, sugirió la planificación de rutas alternativas para visitar diversas iglesias de la capital, garantizando la seguridad de los peregrinos.
En respuesta a los desafíos presentados por las obras del Tren Maya, algunas agrupaciones antorchistas han cancelar su participación anual en las peregrinaciones. El Párroco informó que los antorchistas guadalupanos, provenientes de estados como Yucatán, Chiapas, Campeche y Tabasco, expresan su fe y cumplen promesas a la Virgen de Guadalupe.
Martín Leal recordó que el año pasado recibieron a mil 500 peregrinos y anticipa una afluencia mayor este año, superando los dos mil peregrinos, con expectativas de llegar a cinco mil el 12 de diciembre, Día de la Virgen, con misas programadas cada dos horas.
