El Vaticano activa su maquinaria: así se prepara la Capilla Sixtina para el Cónclave Papal
Más de 60 trabajadores acondicionan la Capilla Sixtina con precisión milimétrica para recibir a los 133 cardenales electores; el secreto, la tradición y la tecnología se conjugan en este evento histórico.
Con la instalación de la emblemática chimenea en la Capilla Sixtina este viernes, el Vaticano activó formalmente el protocolo para el inicio del Cónclave 2025, donde se elegirá al próximo Papa tras el fallecimiento de Francisco. Aunque la fumata blanca será el signo más visible, tras bambalinas se ejecuta un riguroso proceso logístico con más de 60 trabajadores involucrados.
La transformación de la Capilla Sixtina
Desde el 28 de abril, la Capilla Sixtina cerró sus puertas al turismo para convertirse en el escenario más importante del catolicismo. Un equipo especializado, compuesto por carpinteros, herreros, electricistas, floristas, técnicos en climatización y limpieza, acondiciona el recinto que alberga el Juicio Final de Miguel Ángel.
Entre las primeras tareas destacan:
- Instalación de dos estufas conectadas a una chimenea temporal
- Montaje de una estructura metálica para las fumatas
- Oscurecimiento de cristales del Palacio Apostólico
- Precintado de más de 80 accesos para garantizar el aislamiento total
Un despliegue técnico de precisión
El subdirector del Área de Infraestructuras del Vaticano, Silvio Screpanti, detalló que, aunque el sistema de fumata es electrónico, un técnico se mantendrá en vigilancia para intervenir si ocurre alguna falla. “Ningún imprevisto puede obstaculizar este momento simbólico”, explicó.
Asimismo, el recinto ha sido nivelado con una plataforma especial sobre el suelo de mármol renacentista, sobre la cual se colocan los muebles, las mesas y los asientos identificados con los nombres de los 133 cardenales electores.
Compromiso, secreto y confinamiento
Al igual que los cardenales, los trabajadores del Vaticano deberán firmar un juramento de confidencialidad. Estarán completamente aislados, sin contacto con el exterior y pernoctarán dentro del Vaticano durante todo el proceso.
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Una vez finalizado el cónclave, el equipo deberá desmontar en tiempo récord toda la estructura y comenzar los preparativos para la Misa de inicio del nuevo pontificado, que se celebrará en la Plaza de San Pedro.
Tradición, tecnología y dedicación
La decoración floral del balcón de la logia central de San Pedro, desde donde el nuevo pontífice saludará al mundo, también es parte esencial del protocolo. Este balcón fue el último en ser utilizado por Francisco.
“Es especialmente emocionante observar la dedicación con la que cada compañero desempeña su labor en su respectivo ámbito de competencia”, afirmó Screpanti.
