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Lluvias y nieve complican el Día de Acción de Gracias en varias ciudades de EE. UU.

A partir de este miércoles y durante los próximos días, un sistema climático severo traerá lluvias y nieve a gran parte del territorio de Estados Unidos, lo que afectará a los 80 millones de personas que se estima estarán en movimiento durante el fin de semana largo por el Día de Acción de Gracias.

En el oeste del país, estados como Colorado ya enfrentan los primeros efectos de la tormenta, con hasta tres pies (90 centímetros) de nieve en algunas áreas. Este clima extremo ha provocado el cierre de varias vías y autopistas en las principales ciudades de la región, como Denver y Boulder. El Servicio Nacional de Meteorología ha advertido que las tormentas de nieve se extenderán hacia Utah, Wyoming y las Montañas Rocosas, antes de desplazarse hacia el este, alcanzando el Valle de Mississippi y estados como Tennessee y Ohio.

Este pronóstico meteorológico podría alterar los planes de viaje de millones de estadounidenses que, según la Asociación Estadounidense del Automóvil (AAA), se desplazarán por carretera o avión en ocasión del Día de Acción de Gracias. De acuerdo con las estimaciones, unos 71.7 millones de personas optarán por el automóvil, lo que representa un aumento de 1.3 millones en comparación con el año pasado. Además, la Casa Blanca ha señalado que el número de viajeros alcanza un récord debido a la caída de los precios de la gasolina, que se encuentran por debajo de los 3 dólares por galón en 30 estados.

Por otro lado, se espera que las tormentas sean más ligeras en el noreste y el medio oeste del país, con ciudades como Cleveland, Maine y partes de Nueva Inglaterra recibiendo hasta siete pulgadas (17 centímetros) de nieve. Aunque estas precipitaciones no representan una amenaza de inundaciones, podrían generar condiciones peligrosas en las carreteras.

En el sureste y noreste, la lluvia persistente será la principal característica del clima, sin causar inundaciones graves, pero provocando un Día de Acción de Gracias muy húmedo en ciudades como Nueva York, Washington, Filadelfia, y Boston, así como en áreas más al sur, incluyendo Cincinnati, Pittsburgh, Atlanta y Charlotte.

Mientras tanto, el centro del país, en estados como Montana, Nebraska y las Dakotas, experimentará un descenso brusco de temperaturas debido a un frente de viento ártico que llevará los termómetros a niveles típicos de pleno invierno, con valores que podrían llegar a los 30 grados Fahrenheit (-1°C) en algunas ciudades del Medio Oeste, como Chicago.

Los meteorólogos alertan que este frente frío podría afectar a más de 190 millones de personas hacia el sábado, extendiéndose por el norte y el sur del país, lo que podría generar condiciones peligrosas para quienes viajen durante esta festividad.

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