Conoce qué tipo de ejercicio es más efectivo para perder peso
¿Por qué caminar es una buena opción?
Caminar es una actividad accesible y sencilla que muchos incorporan a su rutina diaria. No requiere equipamiento especial, y es fácil de adaptar a cualquier estilo de vida. Al caminar, se activa el sistema cardiovascular, lo que promueve la quema de calorías y mejora la circulación sanguínea. Además, es una excelente opción para personas que comienzan un plan de ejercicio, ya que es de bajo impacto y reduce el riesgo de lesiones.
El cuerpo humano quema calorías constantemente, incluso al realizar actividades básicas como secarse el pelo o conducir. Al caminar, se puede aumentar el gasto energético diario sin la necesidad de realizar un esfuerzo excesivo. Para quienes buscan perder peso, añadir más pasos a su rutina, como caminar hasta el trabajo o bajar una parada antes, puede ser una estrategia efectiva.
¿Por qué subir escaleras es más eficiente?
Por otro lado, subir escaleras se considera una opción más intensa en comparación con caminar. Este ejercicio trabaja más grupos musculares, incluyendo los glúteos, los gemelos y los cuádriceps, lo que aumenta el esfuerzo físico y, por lo tanto, el gasto de calorías. Según estudios, subir escaleras regularmente puede tener un impacto significativo en la reducción de grasa corporal y en la tonificación muscular.
La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) destaca que subir y bajar escaleras durante solo siete minutos al día puede cubrir la recomendación mínima de actividad física diaria. Además, subir dos pisos cada día podría llevar a una pérdida de hasta 2,7 kilos al año, lo que lo convierte en un ejercicio muy eficiente para quienes desean bajar de peso.
¿Cuál es más efectivo?
Si bien ambos ejercicios ofrecen beneficios, subir escaleras resulta ser más efectivo que caminar en términos de gasto energético. Un estudio de la Universidad de Sassari reveló que subir escaleras está asociado con una mayor longevidad, ya que incrementa la condición física, reduce el riesgo de enfermedades del corazón y combate el estrés.