
Quintana Roo, uno de los destinos turísticos más visitados de México, no solo destaca por sus hermosas playas y paisajes naturales, sino también por su increíble diversidad cultural.
Según el último censo realizado por el INEGI, en el estado habitan personas originarias de más de 120 países, lo que convierte a esta región en uno de los lugares con mayor concentración de población extranjera en el país.
Casi la mitad de la población de Quintana Roo está conformada por personas provenientes de otras partes del mundo, destacando comunidades de Estados Unidos, Canadá, Europa y América Latina.

Esta multiculturalidad ha transformado al estado en un crisol de culturas, donde se mezclan tradiciones, idiomas y costumbres, enriqueciendo la vida cotidiana de sus habitantes.
La ciudad de Cancún, en particular, es el principal destino de esta población diversa, atraída por las oportunidades laborales en el sector turístico y la calidad de vida que ofrece el Caribe Mexicano.
Esta convivencia internacional no solo ha dejado huella en la gastronomía local, sino también en el arte, la música y las tradiciones que, fusionadas, han creado una atmósfera única en la región.
Este fenómeno de integración cultural es prueba de cómo la migración y el turismo contribuyen a la creación de una sociedad plural y dinámica, donde las fronteras se difuminan en favor de la colaboración y el entendimiento mutuo.
Sin duda, Quintana Roo es un claro ejemplo de cómo la diversidad puede ser un motor de crecimiento y desarrollo.